jueves, 20 de septiembre de 2012

Sabores


Lo dice vacuamente
el contacto de la lengua con el cielo
del paladar Élitros que se juntan
para aplastar una figura
que dice vacuamente
en calidad de testigo de su desaparición:
"lo he dicho, de modo tangencial,
algo espeso y oscuro,
un ave asimétrica que pasa el peso de la tierra
de un ojo a otro
desarrollando una tara mental, una grieta
por la que tal vez podría deslizarse el alma
no sin antes decir:
"es un sabor vagamente salino,
áspero como sería el esqueleto de una llama,
una chispa petrificada Es
como el surco abovedado al transcurrir
una serpiente translúcida de cénit a nombre"

***

Una posibilidad de vuelo: enjambrar
Barrer las carcasas 
con el canto de la mano hacia la boca
y proponerse,
ante el inminente amargor, un instante
fuera de los sentidos
Entonces el flujo seco de las carcasas aplastadas,
la saliva opacándose,
los labios como costras del vacío
Todo negado por el tiempo
desde ése instante